viernes, 29 de julio de 2022

 

  LA IMAGEN DE SAN ANTONIO DE PADUA EN LA HOYA

 


Fotografía realizada por el propio escultor José María Alarcón Pina, año 1939

Archivo de: Remedios y Marisol Alarcón

Facilitada por: D. Marcial Poveda Peñataro.

Colección: A. Antón San Martín

 La Hoya- Elche, Enero 2019

En el año 1858 los dos diputados de La Hoya y Daimés solicitaron un altar del convento de la Encarnación que en aquellas fechas había sido abandonado por la amenaza de ruina que presentaba, debido a las fuertes tormentas acaecidas en la noche del 6 al 7 de diciembre del año 1853, para poder instalarlo en la ermita que estaban construyendo para las dos partidas. Se les concedió el altar de San Antonio de Padua, junto con este se les concedió la imagen de San Antonio de Padua que según referencias era una talla de reducidas proporciones. En el año 1870 y con motivo de la celebración del V Centenario de la Venida de la Virgen (en este caso por transcripción oral me indicaron en su día) que se aprovecha la ocasión para encargar una nueva imagen porque la que tenían del convento se encontraba muy deteriorada.

 La imagen primitiva, según la misma fuente anterior, se la quedo uno de aquellos diputados en su casa y cuando vendió esta, la traslado a otro nuevo emplazamiento y al parecer aquí se pierde su pista. Miguel Macia Guillo se llamaba este, y es el año 1908.

 Cuando en el año 1936 el último día de febrero un grupo ¿de exaltados? se disponen a quemar la ermita, llegado el momento no lo hacen, si no que sacan todo lo que había en su interior y una vez amontonado en la puerta, hacen una hoguera, desapareciendo todo lo que existía en la ermita, por supuesto aquella imagen de San Antonio, que se había adquirido aquel ya lejano 1870

  Terminada la Guerra Civil, en mayo de 1939 reunidos la mayoría de los vecinos de La Hoya y Daimés, se decide el traslado de la ermita de su antiguo emplazamiento al actual, el 15 de julio de 1939 comenzaron las obras de la construcción de la nueva ermita bendecida el 1 de enero de 1940.

  Durante la construcción de la ermita se hace necesario la adquisición junto con otros enseres de culto, de una nueva imagen, siendo esta la que se venera actualmente en su altar, sin saber demasiado de su historia hasta la fecha. Solo comentarios en los que se decía que la imagen que existe en la hornacina exterior sobre la puerta fue regalada por el hermano de la maestra, porque la imagen de San Antonio fue esculpida en el taller en el que trabajaba este ¿…? (Cabe pensar que este sería el boceto de la propia imagen).

  Actualmente ( año 2017) y gracias a las indagaciones de don Marcial Poveda Peñataro y a un extenso artículo  de este mismo, junto con don Carlos Enrique Navarro Rico, titulado “El escultor José María Alarcón Pina: vida y obra”, en el libro conmemorativo de la celebración del 75 aniversario de la hermandad del Santísimo Cristo Crucificado de Monóvar, celebrado en el año 2015, y publicado en marzo de 2016,  podemos saber un poco de su historia, y  asegurar, que a pesar de no haber encontrado la firma de su autor, es del escultor monovero, José María Alarcón Pina, siendo además, posiblemente una de sus primeras obras. (Este sería su gran valor artístico e histórico)

   Los antecedentes de la relación de este escultor con La Hoya, tenemos que buscarlos en su hermana, Doña Remedios Alarcón Pina, que fue maestra de la escuela unitaria de niñas en La Hoya desde 1934, y terminada la guerra civil, fue de nuevo confirmada en el cargo. (Cátedra Pedro Ibarra, U.M.H)

     Siendo esta la posible vinculación de José María con La Hoya.

     La afirmación de su autoría, también se encuentra en un semanario de la época llamado RENACER (también facilitado por D. Marcial Poveda y mencionado en el artículo citado anteriormente) que el 14 de agosto de 1939 en un artículo redactado de una forma muy gongorina, publicado en su página 7 y titulado:

“Valores de nuestra provincia”,

José María Alarcón:

    Un redactor que firma como J.G.E., dice:

(EL LUGAR)

…...” Curioseando (….) allá en los ubérrimos campos de illice, (,,,) hacemos el descubrimiento

(EL AUTOR)

……” Es casi un asceta, parece que nuestra visita le va a robar su inspiración, pero correcto y caballeroso, como hombre de corte, (téngase en cuenta que en 1934 ya era profesor de dibujo en el colegio Ntra. Sra. De Covadonga en Madrid), nos muestra su obra. Una figura franciscana, que nos recuerda a Montañés, a Dónatelo y a Capuz.

…..” El joven escultor José María Alarcón está moldeando una magnifica figura de San Antonio de Padua, con destino a la ermita de La Hoya” ….

(LA IMAGEN)

……” La unción religiosa de la figura, el ropaje, amplio sayal de complicados pliegues, y su estilo moderno de recia factura, constituyen una verdadera obra de arte……

  Después de todo lo dicho no debe existir duda de su autoría.   

La duda ahora es del lugar donde fue esculpida, porque hay personas que en su día dijeron, que ellos fueron los que transportaron la imagen desde Elche (ciudad) a La Hoya, pero desgraciadamente estas personas ya no están para confirmarlo. Si la transportaron desde la ciudad no sabemos el Lugar. 

   Escribe D. Marcial Poveda:

 

….La imagen que debe rondar el metro de altura presenta al santo sosteniendo a Jesús niño en su brazo izquierdo y mirándole tiernamente. La ausencia de elementos accesorios y de complicaciones formales denota ese “estilo moderno” citado por el periodista con el que se refiere a las entonces nuevas tendencias escultóricas, y que también se aprecia en este caso en una ligera descomposición en planos de los paños del hábito…

 

                           A.  Antón San Martín

 

Bibliografía: El Cristo, 75 años en Monóvar.

(Libro conmemorativo del 75 aniversario del Cristo Crucificado de Monóvar)

Semanario Renacer facilitado a D. Marcial Poveda por Dª Gema Rubio.

P.D.: D. Marcial Poveda Peñataro, es cronista oficial de la ciudad de Monóvar, e investigador de la obra de José María Alarcón Pina.